Liturgia

ORACIONES DE LA MAÑANA

OFRECIMIENTO DE OBRAS

Al comenzar el nuevo día, Señor, te pido que me ayudes, que me libres de todo mal, de todo peligro y de todo pecado; que sean buenas mis palabras, mis miradas, mis sentimientos, mis acciones y el fondo de mi corazón. Te ofrezco, Señor, todos mis pensamientos, obras y trabajos de este día. Bendícelos a fin de que no haya ninguno que no sea hecho por tu amor. Amén.

 

 

¡OH SEÑORA MIA!

¡Oh Señora mía! ¡Oh Madre mía! Yo me ofrezco enteramente a ti; y en prueba de mi filial afecto te consagro en este día mis ojos, mis oídos, mi lengua, mi corazón, en una palabra, todo mi ser. Ya que soy todo tuyo, Madre de bondad, guárdame y defiéndeme como cosa y posesión tuya. Amén.

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AL ANGEL CUSTODIO

Ángel de mi Guarda, dulce compañía, no me desampares ni de noche ni de día; por donde quiera que yo ande seas mi amparo, mi luz y mi guía, no me dejes nunca solo, ya que si tí me perdería.

 

 

PROPOSITOS PARA EL DIA

Para con Dios:
- Me acordaré con frecuencia de Dios, mi Padre.
- Le daré gracias y le ofreceré mi trabajo.
- No permitiré que me venzan en ningún momento los respetos humanos.
- Rezaré con pausa y atención mis deberes de piedad.

Para con mi prójimo:
- Trataré bien a los que me rodean y procuraré hacerles la vida más agradable.
- No trataré a nadie con dureza ni menosprecio.
- No hablaré mal de nadie y sabré perdonar a todos los que me ofendan.
- Rezaré y ofreceré sacrificios por todas aquellas personas que me preocupan.

Para conmigo mismo:
- Lucharé hoy por mi propia santificación.
- No me dejaré llevar por el orgullo en ningún momento.
- Rechazaré toda tentación de sensualidad.
- Lucharé contra mi defecto dominante.